Tras un fin de semana de excesos, esta es una fantástica receta para empezar la semana. La sopa de calabacín y espinaca que hoy os proponemos es muy ligera y no tardaréis mas de 30 minutos en prepararla. Tiene un color fantástico, un sabor intenso… ¿necesitáis mas razones para meteros en fogones?
Una cazuela grande y media docena de ingredientes es todo lo que necesitáis para prepararla. Ponedlo al fuego y mientras se hace disfrutad de un buen libro o una copa de vino para relajaros. ¿Mi consejo? Haced una buena cantidad y congelarla en tarros; tendréis una estupenda cena cuando no os apetezca cocinar.
- 1 calabacín mediano
- 2 patatas medianas
- ½ cebolla
- 2 zanahorias
- 5 puñados de espinacas frescas
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal
- Pimienta
- Preparamos las verduras. Pelamos y cortamos en trozos las patatas y las zanahorias. Cortamos también el calabacín y dividimos en dos la cebolla.
- Vertemos un chorrito de aceite de oliva en una cazuela grande y la ponemos a fuego medio. Introducimos la cebolla, la patata y la zanahoria. Sofreímos unos segundos para que la cebolla coja algo de color.
- Incorporamos el calabacín y rehogamos unos minutos antes de cubrir las verduras con agua. Cocemos durante 25 minutos.
- Pasados los 25 minutos, añadimos las espinacas y cocemos 4 minutos mas.
- Trituramos la sopa y salpimentamos al gusto.