Hoy en día cuando nos metemos en la cocina son muchos los platos que podemos realizar, ya que en el mercado se encuentran ingredientes de todo tipo y para todos los gustos, por eso os ofrecemos a diario manjares deliciosos para que os animéis a realizarlos vosotros mismos.
La receta que os mostramos hoy es un guiso de albóndigas con sepia y guisantes que esta para chuparse los dedos, por lo que si queréis aprender a prepararlo.
Como siempre tendréis que comprar los ingredientes necesarios y organizaros en el tiempo, como siempre hacemos.
Grado de Dificultad: Medio
Tiempo de Preparación: 1h 30 minutos
Ingredientes:
- sepia
- carne picada
- pan rallado
- huevo
- patatas
- tomate
- guisantes
- coñac
- perejil
- ajo
- agua
- aceite
- sal
Ya tenemos todos los ingredientes preparados, así que nos ponemos manos a la obra con ello.
Comenzamos poniendo en un recipiente grande la carne picada, que puede ser tanto de ternera, como de cerdo o bien mezclada, a gusto de cada uno. A la carne deberéis añadirle el huevo y el pan rallado y mezclarlo todo bien con ayuda de un tenedor.
Cuando tengáis la mezcla bien hecha, pondréis una sartén con aceite en el fuego y dejáis que se caliente, mientras tanto vais haciendo bolitas con la carne picada y las pasáis por el pan rallado, para conseguir las albóndigas. Por otro lado, mientras vais haciendo las albóndigas en el aceite caliente, cortáis las sepias en tiras y las hacéis en otra sartén con un poco de aceite, controlando que no se peguen.
Ahora que las albóndigas están doradas las retiramos a una fuente y reservamos para luego. A continuación tendréis que poner varios tomates en un recipiente alto para poder realizar el sofrito, con un poco de perejil y sal. Ahora que las sepias ya están mas bien hechas, es el momento de añadir un chorrito de coñac y prenderle fuego, hasta que se consuma y le de ese toque especial, momento justo para agregarle el sofrito de tomate, sin dejar de mover para que no se queme.
Del mismo modo, ya podéis comenzar a pelar patatas y cortarlas a trozos, para colocarlas con la sepia y las albóndigas, todo en la misma cazuela, y se añade agua hasta cubrirlo todo, deberéis ir controlando el tiempo y cuando las patatas estén blandas ya estará listo para servir.
Nos queda desearos buen provecho y ya sabéis, si algún ingrediente no es de vuestro agrado, cambiarlo por otro.