Este fin de semana ¡va de postres! Ayer os proponía un bizcocho de zanahoria con harina de espelta espectacular para vuestros desayunos o meriendas. Hoy, una tarta de queso y galletas muy fácil que se convertirá en un gran aliado cuando tengáis invitados en casa o queráis sorprender a alguien.
La tarta de queso que hoy os propongo es un juego de niños. Tan fácil como mezclar todos los ingredientes al fuego y dejar que cuaje en la nevera toda la noche. ¿A qué ahora os resulta aun mas atractiva? Podéis ponerle una capa de galleta, varias… eso ya a vuestro gusto.
- 1 Paquetes de galletas rectangulares
- 260 g. queso crema tipo Philadelphia
- 600 g. nata para montar (35%m.g)
- 150 g. azúcar
- 150 g. leche
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- 2 sobres de Cuajada
- Caramelo líquido para el molde
- Repartimos el caramelo en el molde de manera que quede cubierta toda la superficie
- Ponemos en un cazo todos los ingredientes, menos las galletas, y cocinamos a fuego medio 6-7 minutos sin dejar de remover con varillas manuales, hasta que quede una mezcla ligeramente espesa. ¿Os quedan grumos? Podéis batir con la batidora hasta que quede una mezcla fina.
- Fuera del fuego ya, dejamos templar un poco la mezcla antes de montar la tarta para que espese un poco mas.
- Vertemos la mezcla en el molde, sobre el caramelo, hasta cubrir toda la superficie
- Para terminar, colocamos una capa de galletas sobre la crema
- Tapamos con film transparente y dejamos en el frigorífico toda la noche, un mínimo de 16 horas.
- A la hora de servir, la desmoldamos dándole la vuelta, de forma que las galletas queden debajo.