Tomate frito casero
Hacer salsa de tomate casera en casa es algo que realmente merece la pena. Muchas marcas nos venden recetas caseras, recetas de la abuela… pero nada tiene que ver con una buena salsa de tomate hecha en casa con paciencia y buenos ingredientes. Además es un producto muy consumido en casa, para pastas y arroces, para un pisto, para hacer una pizza…las utilidades son enormes y nos alegrará saber que contamos con ella en nuestra despensa.
Hoy os mostramos como hacer una salsa de tomate casera básica, solo usamos tomates, así no condicionamos la salsa a la hora de usarla pero si lo preferimos podemos añadir ajo, cebolla o hierbas aromáticas para darle el toque que nos guste. Lo importante es animarse a hacerlo y poco a poco iremos encontrando la fórmula que más se ajuste a nuestras necesidades.
- 2 kg de tomates maduros
- 100 ml aceite de oliava
- azúcar
- sal
- Empezamos quitando la piel a los tomates, para ésto lo mejor es escaldar. Lo primero es hacerle dos cortes al tomate en forma de cruz. Ahora en un cazo con agua hirviendo los vamos metiendo durante unos segundos. Los sacamos y los metemos en agua muy fría para parar la cocción. Veréis que así la piel sale de maravilla.
- Seguimos, ahora los troceamos y los metemos en una olla grandecita, aprovechamos todo el jugo que suelten.
- Añadimos un buen chorro de aceite de oliva y un buen pellizco de sal.
- Empezamos a cocer a fuego fuerte y removemos bien para repartir el aceite.
- Cuando pasen unos minutos bajamos el fuego a medio-bajo y dejamos que se haga el tomate lentamente, sin prisas.
- El tiempo de cocción dependerá del agua que tengan los tomates, pero una hora no nos la quita nadie.
- Cuando tengamos la salsa de tomate frito lista probaremos de sal y añadiremos azúcar si es muy ácido.
- Ahora podemos hacer dos cosas, o triturar con batidora y luego colar o pasarlo por un chino y así quitar las semillas y obtener una salsa de tomate fina. Eso a vuestra elección.
- Ya podéis disfrutar de una autentica salsa de tomate casera 100%