Si hay algo que gusta tanto a grandes como pequeños y que sirve tanto para comer a mediodía como para cenar es sin duda unas buenas pizzas caseras. Sólo necesitamos unas bases de masa y luego con un poco de imaginación y creatividad culinaria ir añadiendo el resto.
Selecciona aquellos ingredientes que más te gusten y ve añadiéndolos uno a uno con cierto orden lógico (esto es, tomate primero, queso último). Después sólo necesitarás un horno para hornear y ¡listo!
A continuación te dejo con los ingredientes que yo le añadí. ¡Salieron riquísimas!
- 2 bases de pizza
- 4 cucharadas soperas de tomate frito (2 por cada pizza)
- 2 pimientos verdes
- 2 latas de atún en aceite de oliva
- 1 cebolla (1/2 para cada pizza)
- Tacos de pavo cocido
- 3 salchichas (1 y ½ por cada pizza)
- 2 lonchas de queso (1 por cada pizza)
- Queso rallado (al gusto)
- Lo primero de todo es sacar con tiempo la base de pizza del descongelador para que nos sea más fácil trabajarla. Con sacarla una hora antes será más que suficiente.
- A continuación, el primer paso es añadirle el tomate frito (2 cucharadas en el centro), que extenderemos con la base de la cucharada hasta los bordes, pero sin llegar a tocarlos.
- El siguiente paso fue añadirle el atún, los tacos de pavo cocido, los pimientos, la cebolla, las lonchas de queso y el queso rallado.
- Lo importante será que ningún trozo de pizza se vea sin ingredientes. El resto es pan comido. Mete al horno, precalentado, unos 15 munutos a 200 grados.
- ¡Que las disfrutéis!
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