Hoy vamos a hacer estos sencillos hojaldres de jamón cocido y queso, una sencilla receta que te solucionará más de una cena. A los niños les encantará y además podrás utilizar este plato como picoteo cuando recibas invitados.
Además de ser muy sencilla de hacer, es una gran solución siempre que te surja un imprevisto. Solo tienes que tener una lámina de hojaldre y algo de embutido. Si como yo eres una apasionada del hojaldre, seguro que en tu congelador no faltará alguna lámina de forma habitual.
Los ingredientes puedes variarlos según el gusto y la ocasión. Esta receta admite muchas variantes, aunque hoy vamos a cocinar la más sencilla de todas. Adaptada tanto para niños como para mayores, lo que además resulta perfecto a la hora de cocinar para la familia.
- 1 lamina de hojaldre
- Jamón cocido
- Queso en lonchas tipo mozzarela o adecuado para fundir
- 1 huevo
- Primero preparamos la lámina de hojaldre, si la compras fresca no será necesario estirarla.
- Sobre la lámina de hojaldre colocamos primero el jamón cocido, cubriendo todo el fondo y dejando unos 3 centímetros sin rellenar por los bordes.
- Sobre el jamón cocido ponemos el queso mozzarela, cubriendo bien toda la base al igual que hicimos con el jamón cocido.
- Enrollamos el hojaldre con cuidado, sin apretarlo demasiado.
- En un cuenco batimos el huevo
- Con la ayuda de un pincel de cocina, pintamos todo el hojaldre por la parte superior, pegando bien las uniones.
- Cortamos con un cuchillo en porciones, no deben quedar demasiado gruesas ni demasiado delgadas.
- Colocamos sobre una bandeja de horno con papel encerado, e introducimos al horno precalentado a unos 200 grados.
- El tiempo de cocción será aproximadamente de unos 10 o 15 minutos, o hasta que veas que el hojaldre está bien dorado.
- Y listo, solo tienes que dejar enfriar a temperatura ambiente antes de tomar.