¿Cuantos de vosotros habéis horneado vuestras primeras galletas durante este confinamiento? Me consta que mucha gente se esta animando a preparar galletas, bizcochos… preparaciones con las que antes no se atrevía. De ahí que la levadura química se haya convertido en un producto difícil de encontrar esta última semana.
No os preocupéis por la levadura química, para esta receta de galletas de almendra y avena no la necesitaréis. No son unas galletas clásicas; la levadura de trigo se sustituye aquí por avena y almendra molidas. Y tampoco llevan azúcar; el dulzor se consigue añadiendo a la masa dátiles triturados.
Aunque sean muy diferentes a las galletas clásicas os puedo asegurar que son unas galletas muy ricas. Mi consejo es que las hagáis finitas para que su superficie quede crujiente. Como comprobaréis hacerlas no tienen ningún misterio; únicamente necesitáis los ingredientes, una picadora o batidora de mano y vuestras manos.
La receta
- 100g. de harina de avena
- 50g. de harina de almendras
- 30g. de aceite de oliva virgen extra
- 40 g. de dátiles sin hueso
- 40 g. de higos secos
- ½ cucharadita de esencia de vainilla
- ½ cucharadita de canela molida
- Comenzamos poniendo a remojo los dátiles y los higos secos en agua caliente durante 10-15 minutos.
- Encendemos el horno y lo precalentamos a 180ºC.
- Aprovechamos también, antes de ponernos con la masa, a forrar la bandeja de horno con papel de horno.
- Para preparar la masa, trituramos todos los ingredientes: harina de avena, harina de almendras, aceite de oliva, dátiles e higos remojados y ligeramente escurridos, esencia de vainilla y canela molida.
- Una vez hecha la masa, colocamos papel de horno sobre una encimera para verter esta encima. La reunimos con las manos, la aplastamos ligeramente y colocamos otro papel encima para poder estirar la masa con el rodillo hasta los 3 mm. de grosor sin que se nos pegue.
- Una vez estirada, con un cortador (o un cuchillo) cortamos las galletas y las colocamos sobre la bandeja de horno. Al terminar, reunimos los cachos de masa sobrante y repetimos la operación.
- Horneamos las galletas de almendra durante 12 minutos o hasta que estén ligeramente doradas.
- Para terminar, las colocamos sobre una rejilla y dejamos que se enfríen.