Hay días en lo que no eliges lo que comes; la despensa lo hace por ti. Esta ensalada de espinacas, mandarina e higos con vinagreta de miel esta hecha con un poquito de esto y otro poco de lo otro. Que no sea una receta meditada, sin embargo, no significa que no sea interesante. De hecho, ¡la repetiremos!
En casa preparamos el menú de toda la semana el sábado y hacemos las compras correspondientes. Y aunque con el tiempo hemos aprendido a ajustar las cantidades, somos conscientes de que es muy difícil que no sobre nada, por eso una comida la dedicamos a acabar sobras tanto cocinadas como no.
De estos ingredientes que han sobrado de esta y otra preparación surgen normalmente ensaladas, platos de pasta o arroces que, en numerosas ocasiones, acaban sorprendiéndonos. Porque improvisar nos obliga a combinar ingredientes que probablemente de otra forma no combinaríamos. Así que atreveros a ¡improvisar! Lograréis platos tan sencillos y saludables como este que hoy os propongo.
La receta
- 200 g. de espinacas
- 2 mandarinas
- 4 higos secos
- 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 2 cucharadas de vinagre balsámico
- 1 cucharadita de miel
- Sal
- Pimienta negra recién molida
- Limpiamos las espinacas, quitamos los rabos y las cortamos, si como las mías son espinacas gigantes.
- Las colocamos en una ensaladera y añadimos los gajos de mandarina a la misma.
- A continuación, incorporamos los higos cortados en láminas.
- En un bol aparte, preparamos la vinagreta mezclando el resto de ingredientes y batiéndolos con un tenedor.
- Aliñamos la ensalada de espinacas con la vinagreta y servimos.