Sencillísima, así es esta receta que hoy os propongo y que se convierte en un perfecto entrante durante los meses de verano. Y es que esta crema fría de puerro y patata resulta muy ligera y se toma sin esfuerzo incluso en esos días en los que las temperaturas parecen no tener techo.
Las patatas aportan textura a esta crema de sabor suave. Una crema en la que yo he renunciado a la nata que tan a menudo se le añade para lograr una textura mas untuosa. Podéis añadirla, aunque os aseguro que no es necesario para disfrutar de esta crema fría.
Unos picatostes y unas hierbas frescas son ideales para acompañar esta crema. Pero también podéis recurrir a unos taquitos de jamón fritos si os seducen mas. Mi cnsejo es que cuando la hagáis preparéis doble ración. Aguanta muy bien en la nevera hasta tres días. y siempre viene bien tener algo fresquito para tomar.
La receta
- 3 cucharadas de mantequilla
- 3 puerros
- ½ kilo de patatas
- 1 diente de ajo
- 5-6 tazas de caldo de pollo
- Sal y pimienta al gusto
- Picatostes
- Un poquito de eneldo fresco
- Preparamos las verduras. Limpiamos bien los puerros, retiramos la parte verde y los cortamos en tiras finas y uniformes. Además, pelamos las patatas y las cortamos en cubos.
- Después, calentamos la mantequilla en una cazuela y cuando esta se derrita incorporamos los puerros y los cocinamos hasta que estén tiernos sin dorarlos.
- A continuación, añadimos las patatas, el diente de ajo, el caldo de pollo, la sal y la pimienta, y llevamos a hervor.
- Una vez hierva, bajamos el fuego y cocinamos a fugo suave durante 25-30 minutos, hasta que las patatas estén muy tiernas.
- Trituramos la mezcla y la pasamos por un pasapurés si la queremos mas fina.
- Dejamos que la crema se temple y después la llevamos a la nevera para tomarla fría.
- Una vez fría, sacamos la crema fría de puerro y patata de la nevera y la servimos con picatostes y un poco de eneldo fresco.
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