Hoy vamos a cocinar este delicioso plato de pollo. Se cocina totalmente al horno y no lleva nada de grasas añadidas, por lo que resulta una opción perfecta, para todas aquellas personas que estén controlando la dieta. Con muy pocos ingredientes, obtendrás un plato riquísimo y perfecto para cualquier época del año.
Además, es una opción perfecta para cualquier menú familiar, ya sea en la cocina del día a día, o para alguna ocasión especial. Si tienes que ser anfitrión en una cena especial, no dudes en servir este plato de pollo asado. El éxito estará garantizado y además te resultará muy fácil de hacer y económico.
Contramuslos de pollo asado
Contramuslos de pollo asado
Autor: Toñy Torres
Cocina: Spanish
Tipo de receta: Comida
Raciones: 2
Tiempo de preparación:
Tiempo de cocinado:
Tiempo total:
Ingredientes
- 2 contramuslos de pollo de corral
- 2 patatas medianas
- Media cebolla
- 2 dientes de ajo
- Perejil
- Vino blanco
- Sal
Preparación
- Primero preparamos los contramuslos de pollo, debemos quitar el sobrante de grasa para no añadir exceso de grasas.
- Lavamos bien y secamos con papel absorbente.
- Realizamos unos cortes sobre la carne de los contramuslos, para que se cocinen bien por dentro.
- Cortamos la cebolla en juliana.
- Pelamos y lavamos bien las patatas, cortamos en rodajas de un centímetro de grosor aproximadamente.
- En una fuente apta para horno, colocamos primero la cebolla, después las patatas y sobre ellas colocamos los contramuslos, primero la parte inferior.
- Echamos un buen chorreón de vino blanco sobre el pollo y la guarnición.
- Pelamos y cortamos los ajos en finas rodajas, colocamos sobre los contramuslos.
- Añadimos sal y perejil.
- Incorpora medio vaso de agua al fondo de la fuente, de esta forma rebajaremos el sabor del vino en la salsa.
- Introducimos al horno precalentado a unos 200 grados.
- Dejamos que el pollo se cocine por un lado durante unos 45 minutos, dependiendo de la potencia de tu horno.
- Pasado ese tiempo o cuando esté bien cocinado, damos la vuelta a los contramuslos y aprovechamos para mover un poco las patatas.
- De nuevo dejamos cocinar unos 45 minutos, vigilando para que no se queme demasiado.
- Y listo, ya tenemos nuestro delicioso pollo, con unas tiernas patatas.
Notas
Si no vas a servir el pollo al momento, reserva fuera del horno una vez que esté cocinado y calienta antes de servir. De esta forma evitarás que la carne del pollo mengue por el calor.