¿Buscas una receta de bizcocho que sea fácil recordar? Este bizcocho básico a la canela podrás hacerlo allí donde vayas, ya que solo necesitarás para ello un puñado de ingredientes básicos y un vaso de agua como referencia para calcular las cantidades. Además, memorizar la receta será cosa de niños una vez lo hayas hecho un par de veces.
Mas allá de su sencillez os gustarán, además, tanto el tamaño de este bizcocho, perfecto para esas ocasiones en las que reunimos a la familia en casa, como su esponjosidad. Es, sin duda, uno de los bizcochos mas esponjosos que he probado y puede mantenerse así hasta tres días si se guarda herméticamente.
¿No tenéis ganas de probarlo? Pon a calentar el horno y tendrás listo este bizcocho en poco mas de una hora. Utiliza un molde de al menos 22 cm de diámetro con las paredes un poco altas. Como ya os he anticipado este bizcocho es de gran tamaño y sube mucho en el horno. Procura que queden al menos 3cm de la superficie de la masa al borde del molde. Y no dejes que nadie habrá el horno en los primeros 40 minutos o te pasará como a mi y se afeará su forma.
La receta
- 4 huevos L
- 2 vasos de azúcar
- 1 vaso de leche
- 1 vaso de aceite de girasol
- 1 cucharadita de esenciade vainilla
- 3 vasos de harina
- 1 sobre de levadura
- 1 cucharadita de canela
- Precalentamos el horno a 180ºC.
- En un bol batimos los huevos y el azúcar hasta que la mezcla blanquee.
- A continuación, sin dejar de batir, añadimos el resto de ingredientes líquidos, uno a uno.
- Cuando estén integrados, agregamos la harina, la levadura y la canela tamizadas, y mezclamos con movimientos envolventes, hasta conseguir una masa homogénea.
- Después engrasamos el molde o lo forramos con papel de hornear y vertemos en este la masa.
- Horneamos a 180ºC hasta que el bizcocho esté cocido, aproximadamente durante 55 minutos. .
- Una vez hecho, sacamos el bizcocho del horno y dejamos que temple 10 minutos para desmoldar sobre una rejilla y dejar que se enfríe completamente.