Este es un plato sencillo y al mismo tiempo llamativo por la combinación de colores que nos proporcionan las frutas y hortalizas utilizadas. Pimientos verdes, rojos y amarillos se combinan con la zanahoria en una estupenda guarnición que puede servirse tanto con un plato de carne como de pescado.
Tanto los pimientos como las zanahorias se cortan en forma de palitos, si son del mismo tamaño mejor que mejor; mas lucirá la presentación. Sirven como guarnición en este caso de unos filetes de solomillo de cerdo, una carne tierna perfecta para toda la familia. ¿Os animáis a probarlo?
- 1 solomillo de cerdo
- 1 pimiento verde
- ½ pimiento rojo
- 1 pimiento amarillo
- 3 zanahorias
- Aceite de oliva
- Sal
- Pimiento
- Vinagre de módena
- Cortamos en palitos los pimientos y las zanahorias.
- En una sartén ponemos un chorrito de aceite a calentar y los salteamos hasta que los pimientos estén tiernos. Entonces, echamos unas gotitas de vinagre de módena, removemos los palitos y cocinamos un minuto mas. Tened en cuenta que la zanahoria tarda mas en hacerse; si no os gusta «al dente» podéis echarla en la sartén un poco antes de los pimientos.
- Mientras los palitos se cocinan, cortamos el solomillo de cerdo en filetes de aproximadamente 2 cm de grosor. Salpimentamos.
- Cuando los palitos de pimiento y zanahoria estén hechos, sellamos la carne en aceite caliente.
- Servimos la carne junto con los palitos de pimiento y zanahoria.
Muy excelente es una opción para clientes de gran gusto