La madeleine es un bizcocho de pequeño tamaño y con forma de concha cuyo origen parece encontrarse en la región de Lorraine, al noreste de Francia. Puede parecernos a priori que pudiera tener una elaboración semejante a la de las clásicas magdalenas, pero no es así, hay pequeños matices que las diferencian.
La madeleines no puede improvisarse; su masa requiere cierto reposo en frío antes de ser horneada. Además de ésta, hay otra importante diferencia con respecto a las magdalenas clásicas; aquí habitualmente la mantequilla se derrite y se incorpora al final del proceso. Dejando su elaboración a un lado, el resultado es fantástico. Son bizcochitos muy tiernos y con un tamaño ideal para servir como desayuno o merienda.
- 113 g. de mantequilla,
- 3 huevos XL a temperatura ambiente
- La ralladura de un limón
- 1 cucharadita de vainilla líquida
- 130 g. de azúcar
- 130 g. harina trigo
- ½ cucharadita de levadura en polvo
- Pizca de sal
- Azúcar glas (opcional)
- Derretimos en un cazo la mantequilla y la reservamos tibia.
- Batimos los huevos con el azúcar a velocidad alta hasta que blanqueen y logremos una mezcla esponjosa.
- Añadimos la vainilla y la ralladura de limón y batimos a velocidad alta hasta integrar ambos ingredientes.
- Incorporamos poco a poco la harina tamizada con la levadura. Mezclamos a velocidad muy baja o con una espátula realizando movimientos envolventes para que la masa no se baje.
- Por último, añadimos en un hilo la mantequilla derretida tibia y la integramos con la espátula de la misma manera.
- Tapamos la masa y la metemos en la nevera 2 horas (pueden ser mas).
- Pasado el tiempo, precalentamos el horno a 190 grados.
- Metemos el molde a refrigerar 10 minutos y después lo engrasamos y enharinamos ligeramente.
- Rellenamos las cavidades del molde con la masa hasta ¾ de su capacidad y horneamos las madeleines entre 8 y 10 minutos, hasta que veamos que están ligeramente doradas.
- Desmoldamos y dejamos enfriar sobre una rejilla y antes de servir espolvoreamos con azucar glas
Muy ricas las madeleines
Y muy sencillas además. Yo las descubri recientemente y siempre procuro tener masa lista para hornearlas.